Consumo de aceite

El consumo de aceite es una cuestión que puede preocupar a los usuarios de vehículos, especialmente al percibir que el nivel baja más rápido de lo acostumbrado.

Es importante revisar los niveles de aceite regularmente.

En esta nota veremos cuáles son las causas del consumo de aceite en un motor, los mecanismos por los cuales se fuga y qué factores pueden aumentar o disminuir los consumos.

Supongamos que tenemos un vehículo al cual recién hemos cambiado el aceite, y hemos cargado en el cárter un cierto volumen de Helix, digamos 4 litros. El auto es una verdadera perla, pero tiene ya sus buenos años. Sabemos que el motor está en buenas condiciones, y no nos tomaríamos el trabajo de volver a medir el aceite, cómo desconfiar de tan noble motor. Varias veces nos han consultado si queríamos revisar los niveles, pero con seguridad dijimos que no. Pasan las semanas y el motor suena tan bien como siempre. Luego de unos meses recorremos nuevamente los 10.000 kilómetros de cambio de aceite que indica el manual original. Para nuestra sorpresa, sacamos la varilla y vemos que el aceite está por debajo del mínimo. De haber seguido andando hubiéramos tenido un problema serio de falta de aceite. Tomamos conciencia de que es importante revisar los niveles regularmente, y nos preguntarnos cómo es que baja el nivel. Podemos imaginar el motor como una caja que contiene un cierto volumen de aceite. Las formas en las que el aceite deja esa caja son:

Sistema aros-cilindro

El aceite en las paredes de cilindros toma una temperatura tal que parte del mismo es evaporado, es decir pasa a una fase gaseosa. El aceite vaporizado puede ser quemado en cámara de combustión, o incluso salir por el escape parcialmente sin quemar. Para una misma viscosidad, aceites sintéticos tienen una mejor resistencia a la oxidación que los semi-sintéticos, y a su vez los semi de los minerales. Esto se comprueba con la prueba de laboratorio NOACK, en la cual se calienta el aceite a 250 °C durante una hora, y se mide la cantidad de aceite evaporado. Aceites sintéticos Shell Helix con tecnología PurePlus, registran valores menores al 10% en el ensayo, este valor es sobresaliente teniendo en cuenta por ejemplo que un mineral puede pasar el 20% de evaporación. Cuando el bruñido de cilindros es correcto, no hay desgaste en aros y no hay excesivas lacas o depósitos en las paredes de cilindros, el consumo de aceite suele estar controlado. El desgaste general del sistema aros-cilindro es siempre promotor de un mayor consumo de aceite.

Guías de válvulas

Así como mencionamos el consumo por aros, es importante mencionar que un desgaste en guías de válvulas puede generar un consumo adicional de aceite, que migra por las mismas.

Turbocompresores: Cada vez es más frecuente encontrar vehículos diesel y nafteros con turbos, e incluso biturbos, los cuales permiten entregar alta potencia en motores de baja cilindrada, lo que comúnmente se denomina “downsizing”. Los turbos, que también son lubricados con el aceite del motor, pueden en ciertos casos ser promotores de un mayor consumo de aceite por sus altas temperaturas y velocidades de giro.

Gases de venteo y “blow-by”: El venteo del cárter y los gases que pasan de cámara de combustión hacia el cárter (blow-by), también son una fuente de consumo de aceite. Si bien la temperatura del cárter es mucho menor a la que enfrenta el aceite en cámara de combustión, es suficiente para causar cierta evaporación.

Pérdidas por retenes: Es una de las formas más evidentes de consumo de aceite, pero vale la pena mencionarla. Cualquier pérdida por retenes, es también un consumo de aceite. Incluimos en este punto pérdidas por una incorrecta colocación del filtro de aceite.

Estilo de manejo: Un estilo de manejo agresivo con aceleraciones bruscas o alta velocidad, puede llevar a un aumento del consumo de aceite.

Mayor viscosidad: Subir la viscosidad del aceite ha sido históricamente un solución al consumo de aceite, dado que es efectivo. Es importante remarcar que aumentar la viscosidad no soluciona un problema mecánico, simplemente disminuye el consumo, especialmente por el sistema aros-camisa mencionado anteriormente. Un aumento excesivo de la viscosidad puede tener algunos efectos negativos, como un aumento de temperatura de trabajo y un motor trabajando más forzado especialmente en frío. Por esto es recomendable sólo en situaciones de alto consumo de aceite.

Como recomendaciones finales, es una buena idea medir regularmente el nivel de aceite y completar siempre con la calidad de lubricante recomendado por manual, teniendo la precaución de no sobrepasar el nivel máximo. Con una simple inspección podemos ahorrarnos un problema y seguir recorriendo kilómetros con aquel noble auto por mucho tiempo más.

Asesor Técnico – Shell Lubricantes