La buena avaricia

Es uno de los autos con motor diesel más accesibles de la Argentina. Batimos el récord histórico de bajo consumo en Lubri-Press (gracias a una rueda pinchada).

El Peugeot 208 no necesita mayor presentación. Se vende en la Argentina desde hace cinco años y, desde hace tiempo, se encuentra entre los diez autos más vendidos del país. Sin embargo, esta versión que probamos en Lubri-Press sí necesita una introducción especial: el Allure 1.6 HDi es la única variante con motor turbodiesel del 208 en nuestro mercado.

Se lanzó a la venta en octubre del año pasado y es uno de los autos gasoleros más baratos de la Argentina. Cuesta 473.700 pesos, lo manejamos una semana y la crítica completa se reproduce a continuación.

POR FUERA

Es un 208. Cualquiera lo distingue a la distancia. ¿Pero cómo se diferencia a un 208 HDi de un 208 naftero? No es fácil, porque esta versión específica, importada de Eslovaquia, no tiene emblemas externos. Aunque sí cuenta con algunos guiños diferenciadores, que sólo apreciará el ojo experto.

Lo más notorio: los espejos exteriores están cromados. En esta unidad de color plateado no se nota mucho, pero sí se destaca en otros tonos. También las ópticas traseras son diferentes. El HDi es el único 208 que tiene esa combinación de elementos, junto con el GTi.

Otra diferencia, que se encuentra un poco más escondida: el 208 HDi tiene frenos a disco en las cuatro ruedas. Con excepción de los GT y GTi, todos los otros 208 de nuestro mercado tienen tambores en las ruedas traseras.

Después, claro: si abrís la tapa de la boca del tanque de combustible, te vas a encontrar con el cartelito amarillo de “Diesel Grado 3”.

Más allá de eso, el 208 HDi cuenta con elementos combinados de otros 208 nafteros: parrilla delantera cromada (como en los Allure), marco de ventanillas cromado (como en los Feline) y salida de escape pulida (como en todos los 208 Active, Allure y Feline).

Viene calzado con neumáticos Michelin Energy Saver 195/55 R16, con llantas de aleación de 16 pulgadas.

El 208 HDi no tiene rivales directos en nuestro mercado. Es el único hatchback del Segmento B (chico) con motor diesel. Los competidores que más se aproximan a su propuesta son dos sedanes del Segmento B, también pertenecientes al Grupo PSA: Peugeot 301 HDi (397.700 pesos) y Citroën C-Elysee HDi (414.900 pesos). Los tres autos mencionados en este párrafo tienen la misma mecánica y plataforma. La única diferencia es la carrocería y el equipamiento.

POR DENTRO

Ya aprendiste a diferenciar el 208 HDi por fuera. Bien ahí. ¿Y por dentro? Querido Nerd de los autos, ahora te invito a usar el tacto de tus dedos: apoyalos sobre el revestimiento de la plancha de instrumentos, que rodea al volante y la pantalla multimedia. ¿Notás que es blandita? Es un material que Peugeot llama “termoformado”, una goma suave al tacto. Este material sólo está presente en los 208 HDi, GT y GTi. En el resto, ese revestimiento es en plástico duro.

¿Alguna diferencia más? Sí, una pequeña, pero vital: abajo y a la izquierda del volante está el botón para desactivar el ESP: sólo los 208 HDi, GT y GTi tienen control de estabilidad en la Argentina.

Como ya ocurre en el exterior, esta versión HDi se llama Allure, pero mezcla equipamientos de los 208 Allure y Feline nafteros. Por ejemplo, tapizado en tela, climatizador bizona y techo panorámico. En los bordes de este techo, el HDi tiene un detalle único entre todos los 208 que se venden en la Argentina: una tira de leds, que se encienden junto con las luces de circulación del vehículo. Un detalle simpático y bonito.

Más allá de eso, es el 208 de siempre, con el peculiar i-Cockpit: esa filosofía de Peugeot, que propone usar un volante chiquito, con el tablero de instrumentos ubicado por encima de la dirección. Es un planteo que en los 208 y 2008 resulta incómodo para las personas altas (yo mido 1,87m), pero que evolucionó de manera notable en los Peugeot más modernos: el i-Cockpit de los 3008 y 5008 es mucho más confortable (leer críticas).

Por lo mencionado, es un auto mejor equipado y terminado que los 208 Allure fabricados en Brasil, pero con las mismas limitaciones: plazas traseras sólo para dos adultos y un baúl compacto. Tiene 318 litros de capacidad y una mala noticia bajo el piso de carga: una rueda de auxilio de uso temporario.

SEGURIDAD

Otra vez, un Allure a la europea. Mientras el 208 Allure naftero brasileño tiene sólo frenos ABS, cuatro airbags y anclajes Isofix, el 208 Allure diesel eslovaco agrega: barras de protección laterales, doble airbag de cortina, control de estabilidad, control de tracción y asistencia al arranque en pendiente.

¿Por qué el eslovaco tiene más equipamiento de seguridad que el brasileño? La respuesta es tan sencilla como deprimente: porque el 208 eslovaco se fabrica para abastecer a Europa, un mercado que tiene consumidores, automotrices, periodistas y gobiernos más comprometidos con la seguridad vial.

El 208 eslovaco (con seis airbags) fue sometido a las pruebas de choque de EuroNCAP. Con el protocolo del año 2012 obtuvo la calificación máxima de cinco estrellas, con 88% en protección de adultos, 78% en niños y 61% en peatones. A modo de referencia, el 208 brasileño (con dos airbags) fue sometido a los crash tests de LatinNCAP. Con el protocolo de 2016 obtuvo dos estrellas en protección de adultos y tres para niños.

MOTOR y TRANSMISIÓN

Eslovaquia, donde se fabrica este 208, está a casi doce mil kilómetros de distancia de la Argentina, pero este motor HDi es francés y bien conocido en nuestro mercado: es el 1.6 turbodiesel (con ocho válvulas, inyección directa e intercooler), que ya equipan varios modelos del Grupo PSA en el país: Citroën Berlingo, Peugeot Partner, Citroën C-Elysée y Peugeot 301.

Entrega 92 caballos de potencia a 4.000 rpm y 230 Nm de torque a 1.750 rpm. Se combina sólo con caja manual de cinco velocidades y tracción delantera. En Europa se ofrecen también otros 208 turbodiesel, con potencias entre 75 y 120 caballos.

Esta variante está equipada con filtro de partículas para cumplir con la norma de emisiones Euro 5. La tapa del tanque de combustible lo informa bien claro, pero conviene resaltarlo: sólo se recomienda usar diesel Grado 3 (también conocido como “Euro”, “Premium” o “el más caro”). Consejo de Lubri-Press: no te compres este auto si no estás dispuesto a cargar ese combustible.

Con la llegada de esta mecánica turbodiesel, la gama del 208 queda conformada con la más amplia variedad de motorizaciones del Segmento B en la Argentina: 1.6 8v HDi (92 cv), 1.6 16v (115 cv), 1.6 16v THP GT (165 cv) y 1.6 THP GTi (208 cv).

COMPORTAMIENTO

La gran ventaja de un motor turbodiesel es el bajo consumo y la autonomía. Pero también la gran cantidad de torque a bajas vueltas. Y eso, en el 208 HDi, no defrauda. El pedal del acelerador se siente lleno, cargado de empuje, con sólo rozarlo. Es un placer moverse con este auto por la ciudad. El par motor generoso garantiza una buena respuesta, pero también permite usar poco la palanca de cambios. Es un beneficio extra de una mecánica que, sin opción de caja automática, permite desplazarse sin problemas: dobla las esquinas en tercera, sin corcoveos ni titubeos.

El consumo en ciudad es ridículamente bajo.

Gasta apenas 6,1 litros cada 100 kilómetros en el ciclo urbano. Se siente cómodo en este entorno, donde sólo hay que señalar que la trompa está algo expuesta a tocar en cunetas, badenes y otros accidentes geopolíticos de nuestras calles.

Sin embargo, donde un motor turbodiesel se luce más, es en la ruta: haciendo muchos kilómetros. Cargué a la familia, llené el baúl de bártulos y salí para Entre Ríos. Nos fuimos con carpa al Parque Nacional El Palmar. En ese campamento hippie-chic, donde abundan los acampantes en Ford Kuga y Ram 1500, el 208 HDi era una presencia modesta, aunque rendidora. Fue el único que unió Buenos Aires con Entre Ríos, gastando apenas medio tanque.

El 208 carga 55 litros del bueno, pero es asombroso cómo rinde cada gota de ese néctar, que ya cotiza a 30 mangos el litro en varias zonas del país. En ruta, a 120 km/h sostenidos, consume apenas 4,1 litros cada 100 kilómetros.

Acelera de 0 a 100 km/h en 12,4 segundos y alcanza los 183 km/h. Para un auto gasolero, con caja de quinta y sólo 92 caballos, son valores dignos. En el cambio más alto y a 120 km/h, el motor trabaja a 2.000 rpm.

El comportamiento del chasis es el mismo de los otros 208: es un auto ágil de manejar, con buenas reacciones en curva. Sin embargo, este HDi se despega de sus primos brasileños por dos grandes virtudes: el control de estabilidad (de excelente funcionamiento) y los frenos a disco en las cuatro ruedas (chiquitos, pero incansables). Sería un gran valor agregado si todos los 208 brasileños sumaran este equipamiento.

El Sábado Santo fuimos a visitar el Palacio San José, la genial mansión-museo de lo que fuera la residencia de Justo José de Urquiza. Cuando volví al estacionamiento, para buscar el auto, me encontré con la rueda trasera izquierda pinchada: se había clavado una llave Allen. Sí, una Allen de punta, en medida 0.7.

Ya sabía lo que me esperaba: descargué el baúl, saqué el cricket, levanté el auto y coloqué la rueda de auxilio de uso temporario. Es una Kleber 185/65R15, más chica que las cuatro titulares. El sticker de seguridad, pegado en la llanta de chapa, es bien claro: no se recomienda circular a más de 80 km/h con esa rueda colocada.

Cuando conté esta anécdota entre amigos, aparecieron muchos ingenieros levantando el dedo. Dijeron que con esta rueda más chiquita se puede viajar a 150 km/h. El problema es que -si te ocurre un accidente o un desperfecto mecánico por encima de la velocidad indicada por el sticker de seguridad- ni el seguro ni la garantía del fabricante cubrirán los daños. En el mundo también hay muchos abogados, amigos ingenieros.

Un feriado en Entre Ríos no es fácil encontrar una gomería abierta. En Caseros, Colón y Concepción del Uruguay, todo cerrado. Así que encaré por la Ruta 14, rumbo a Buenos Aires. A 80 km/h clavados, en una autopista donde mis vecinos de camping me adelantaban a más de 140. Saludos al amigo que tenía una carpa King Size y viajaba en un Honda Accord V6.

Al rato, cuando ya me estaba aburriendo, comencé a jugar con la computadora de abordo y la medición del consumo instantáneo. Claro, en quinta, a 1.500 rpm y a 80 km/h constantes, el gasto de combustible había llegado a un mínimo increíble: 3,5 litros cada 100 kilómetros. Paré a completar el tanque, hice una prueba hasta la siguiente estación de servicio y volví a llenar. La medición “analógica” me dio un cálculo similar: 3,6 litros.

Nunca en mi vida manejé un auto –no híbrido, no eléctrico- que consumiera tan poco.

La temperatura en esa tarde era de 36 grados, así que el aire acondicionado estaba trabajando a pleno. Y el baúl venía bastante cargado (la rueda pinchada cabe perfecta en el hueco, apenas roba espacio). No eran las condiciones ideales para una medición científica, pero así y todo lo que gasta este 208 HDi no tiene otra definición: es un chiste.

De los buenos.

Por fin, encontré una gomería abierta. Un adorador de Ghost Rider sacó la llave Allen con mucho cuidado, colocó un prolijo parche de camión y la probamos. Reparación perfecta. Pude volver a casa con las cuatro ruedas titulares. Y llegué antes que mi amigo del poderoso Accord V6: yo no tuve que parar a cargar combustible.

¿Y la llave Allen? Ahora la tengo de adorno, en el quincho de casa. La colgué junto al cuadro que me regaló mi vieja, cuando yo era adolescente. Lo compró, justamente, durante una visita al Palacio San José. Es la transcripción completa del reglamento más famoso dictado por Urquiza: la “Ley de Vagos”.

CONCLUSIÓN

Los motores diesel existen en la Argentina desde hace décadas. Pero, recién en los años ’60 y ’70, se empezaron a difundir entre los vehículos de pasajeros. Hasta entonces, eran terreno exclusivo de los vehículos de trabajo. Peugeot fue una de las marcas pioneras, con los 403, 404 y 504 gasoleros.

En esa época, los autos diesel tenían un problema. Había pocos, eran caros de comprar y el valor de reventa era bajo, siempre comparado con un auto equivalente naftero. Entonces, a los periodistas de la legendaria Revista Corsa, se les ocurrió una idea: el “Cálculo de Amortización”. La idea era sencilla: “¿Cuántos kilómetros tengo que recorrer con un diesel para que la economía de combustible justifique el gasto extra frente a un naftero?”

Esa ecuación le causó al mercado del diesel un daño mayor que los problemas del DPF. Sobre todo, porque parte desde una premisa falsa (al menos en la actualidad).

Los autos diesel ya no son un misterio y tienen su propio mercado en la Argentina (pequeño, pero con usuarios muy fieles). Y ellos son los que más detestan que les hablen del “Cálculo de Amortización”.

Preguntale a cualquier de ellos y la respuesta siempre será más o menos la misma: “Un diesel no hay que amortizarlo, hay que disfrutarlo. Lo comprás más caro que uno naftero, pero el día de mañana también lo vendés más caro. En el medio, disfrutaste la autonomía y el torque”.

No podría coincidir más, sobre todo en un país como la Argentina. Con enormes distancias y una red de estaciones de servicio cada vez más deprimida, un diesel es un auto perfecto para hacer viaje largos (pero también para disfrutar todos los días).

Europa le declaró la guerra al diesel, después de rendirle culto durante décadas. Argentina, por infraestructura y dimensiones, todavía no puede darse ese lujo.

¿Lubri-Press recomienda la compra del 208 HDi? Desde luego que sí, es un auto sobresaliente. Pero también lo es el Peugeot 301 HDi, con el mismo motor, un mayor espacio interior y por 76 mil pesos menos.

Por eso, el mejor consejo que te puedo dar, es el siguiente: si nunca tuviste un diesel, es hora de que pruebes uno. Son más brillantes y eficientes que nunca. Aprovechalos ahora, antes de que te lo prohíban.

 

Carlos Cristófalo
Producción fotográfica: Lola Tyrrell

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FICHA TÉCNICA

  • Modelo probado: Peugeot 208 Allure 1.6 HDi
  • Origen: Eslovaquia
  • Precio: 473.700 pesos (versiones entre 341.600 y 590.700 pesos)
  • Garantía: Tres años o 100 mil kilómetros.
  • Comercializa: Peugeot Argentina (www.peugeot.com.ar)

MOTOR

  • Tipo: diesel, delantero transversal, cuatro cilindros en línea, dos válvulas por cilindro, inyección directa por common-rail, turbocompresor e intercooler.
  • Cilindrada: 1.560 cc
  • Potencia: 92 cv a 4.000 rpm
  • Torque: 230 Nm a 1.750 rpm

TRANSMISIÓN

  • Tipo: tracción delantera, con control electrónico.
  • Caja: manual, de cinco velocidades.

CHASIS

  • Suspensión delantera: independiente, tipo McPherson, con resortes helicoidales y amortiguadores hidráulicos.
  • Suspensión trasera: eje de torsión, con resortes helicoidales, amortiguadores hidráulicos y barra estabilizadora.
  • Frenos delanteros: discos ventilados.
  • Frenos traseros: discos macizos.
  • Dirección: de piñón y cremallera, con asistencia eléctrica.
  • Neumáticos: Michelin Energy Saver 195/55 R16 (rueda de auxilio de uso temporario)

PRESTACIONES

  • Velocidad máxima: 183 km/h
  • Aceleración de 0 a 100 km/h: 12,4 segundos
  • Consumo urbano: 6,1 l/100km
  • Consumo extraurbano: 4,1 l/100km
  • Consumo medio: 5,1 l/100km

MEDIDAS

  • Largo / ancho / alto: 3.975 mm / 1.740 mm / 1.470 mm
  • Distancia entre ejes: 2.540 mm
  • Peso en orden de marcha: 1.150 kg
  • Capacidad de baúl: 318 litros
  • Capacidad de combustible: 55 litros

EQUIPAMIENTO

  • Doble airbag frontal delantero
  • Doble airbag lateral delantero
  • Doble airbag de cortina
  • Frenos ABS con EBD
  • Control de estabilidad
  • Control de tracción
  • Asistencia al arranque en pendiente
  • Dos anclajes Isofix
  • Alarma volumétrica y perimétrica
  • Antiarranque electrónico
  • Faros antiniebla delanteros y traseros
  • Alarma de cinturón conductor no conectado
  • Traba seguridad mecánica niños en puertas traseras
  • Climatizador automático bizona
  • Limitador y regulador de velocidad
  • Encendido automático de luces
  • Encendido automático de Limpiaparabrisas
  • Espejo retrovisor interno electrocrómico
  • Cierre centralizado de puertas y baúl con activación en rodaje
  • Comando a distancia del cierre centralizado
  • Computadora de abordo
  • Levanta vidrios eléctricos delanteros y traseros
  • Regulación eléctrica de espejos exteriores
  • Asiento trasero rebatible 1/3 – 2/3
  • Apoyabrazos delantero central
  • Techo panorámico vidriado
  • Sensores de estacionamiento traseros
  • Cámara de retroceso
  • Guantera refrigerada
  • Puerto USB, entrada Aux y toma 12V
  • Pantalla táctil de 7″ con equipo de audio Arkamys
  • Mirror Screen con Apple Car Play y Android Auto
  • Comandos de audio al volante
  • Tapizado en tela Cran
  • Volante regulable en altura y profundidad
  • Plancha de abordo termoformada
  • Guía de LED en contorno techo panorámico
  • Luces diurnas y traseras de led
  • Embellecedor de grilla delantera Cromo
  • Salida escape pulida

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