Logística, la clave del servicio

Por Marco Piombino

 

Si el fin de la empresa es tener un cliente satisfecho, se deberá ampliar el recorrido del proceso hasta que el producto llega a las manos de quien lo compra. ¿Cómo llegar de una manera eficiente a los clientes? Si de logística se trata, la clave está en dos conceptos capitales: el servicio y los costos.

En general, todas las empresas buscan alcanzar rapidez en la distribución para satisfacer la demanda y bajos niveles de stock por los costos asociados que esto trae aparejado. El costo logístico siempre tiene relación con el ser vicio que se quiere brindar. En otras palabras, si se pretende elevar su desempeño, el presupuesto destinado al área tiende a subir.

Un proceso logístico eficiente no solo implica entregar un producto o servicio en el lugar y el tiempo acordado, sino que puede transformarse en una oportunidad para lograr mayores ventas.

FERCOL

En Fercol, por ejemplo, buscamos brindar un servicio de calidad, de modo tal que una buena logística es una de las premisas de gestión que tenemos en la empresa. Todo tipo de compañías, ya sean grandes, pequeñas o medianas, deberían tener espacio para lograr que la actividad logística le agregue valor a sus productos o servicios.

Cumplir en tiempo y forma con los clientes es una ventaja competitiva y muy valorada. Un buen servicio de entrega no hace otra cosa que sumar calidad al producto.

Recientemente hemos comentado nuestras experiencias en una nota publicada por la revista Clarin Pymes, desde donde te compartimos cinco claves para que lo logres y así, fidelices a los consumidores y ganes nuevos mercados.

Una organización adecuada y recursos humanos capacitados. Cada compañía es un mundo. Existen estructuras de todo tipo y color. Actualmente, la tendencia más escuchada es la de organizar a la empresa por funciones, delimitando así, las áreas de trabajo. Logística es una de ellas y tiende a trabajar de un modo transversal o integrado con el resto de los sectores.

Información para tomar decisiones. Lo que no se mide tampoco se puede administrar. Por lo tanto, uno de los factores determinantes para que todo proceso logístico se lleve a cabo con éxito consiste en implementar un adecuado sistema de indicadores en posiciones estratégicas.

Objetivos claros y establecidos. Una respuesta rápida a “¿cuál es el objetivo del área de logística?” sería entregar los productos y servicios en tiempo y forma. Al respecto, parecen necesarias respuestas bastante más concretas y complejas. ¿Se trata de bajar los costos o mejorar el servicio? ¿O bien de alcanzar un equilibrio intermedio? ¿A cuáles indicadores se les da mayor importancia?

Planificar y programar con flexibilidad. Una vez estructurada la organización, reconocidos los indicadores apropiados y establecidos los objetivos, lo que queda es planificar la operación. Siempre teniendo en cuenta a los clientes, el segmento al que pertenecen y sus necesidades específicas, y los canales de distribución existentes. La planificación debe ser dinámica, flexible, fácil de acomodar a los escenarios cambiantes de la compañía. Debe poder reaccionar rápidamente a las eventualidades que se presenten.

Ejecutar con eficiencia y mejorar continuamente. Como es natural, ningún esfuerzo, ni el más planificado, puede tener éxito sin una ejecución correcta, cuando no de la mayor eficiencia posible, a fin de brindar un buen servicio a costos competitivos.

Los indicadores ayudan a medir los resultados y encausar las decisiones que se toman. Entonces queda claro que en la empresa, el área de logística, no debe tomarse o administrarse azarosamente sino darle un lugar de privilegio porque constituye el broche de oro en el circuito de la comercialización.

 

* Fercol Lubricantes.