Mil veces Ferrari

Shell y Ferrari comparten varias décadas de historia juntos en las pistas, desarrollando productos para la F1. La gran novedad de Ferrari para el 2020 es el nuevo modelo SF 1000.

La Ferrari SF 1000 celebrará este año el Grand Prix número mil de la Scudería Ferrari en la Fórmula 1.

El monoplaza SF 1000 es el vehículo número 66 que desarrolla Ferrari para la Fórmula 1 y su nombre hace honor a la participación número 1000 de la escudería, que se dará durante este año. La presentación se desarrolló con un gran evento en el Teatro Valli de Reggio Emilia, a unos 30 kilómetros de la ciudad de Maranello.

Los motores de Fórmula 1 son sin dudas una de las mayores pruebas que deben pasar los lubricantes Shell en su alianza técnica con Ferrari. Veremos las principales diferencias con los motores de competición, y cómo se traslada esta tecnología a los vehículos de calle.

¿Cómo es un motor F1 2020?

Al igual que en temporadas anteriores, la regulación de la FIA (Federación Internacional del Automóvil) exige motores híbridos. Esto incluye un motor de combustión interna, un generador eléctrico (MGU-K) que aprovecha la energía de frenado y un segundo generador (MGU-H) que aprovecha la energía del gas de escape, conectado al mismo eje del turbocompresor. La potencia estimada total es de 760 HP; 600 HP del motor de combustión y 160 HP de los generadores eléctricos.

El motor de combustión debe ser de cuatro tiempos, 6 cilindros en V a 90°, y está limitado a una cilindrada de 1600cc (+0/-10cc) y 15000 rpm. Los cilindros tienen un diámetro de 80mm y la carrera es de 53mm, y cuenta con 4 válvulas por cilindro. La inyección de combustible es directa, con una presión máxima de 500 bar. El flujo de combustible no debe exceder los 100 kg/hr y el límite máximo de combustible por carrera es de 110 kg. El MGU-H no debe exceder la velocidad de giro de 125000 RPM, y el MGU-K no debe exceder las 50000 RPM. El peso mínimo motor debe ser de 145 kg.

Por otro lado, el peso mínimo del auto sin combustible debe ser de 728 kg. Esto incluye el peso del vehículo y el conductor utilizando todo su equipamiento de carrera.

De la pista a la calle

Los lubricantes en la Fórmula 1 pueden alcanzar presiones tan altas como 15.000 atmósferas, especialmente en el contacto leva-seguidor. Bajo esas presiones el lubricante se comporta como si fuera sólido, y la transición líquido/sólido se da en un tiempos mínimos. El espesor de película de aceite en cojinetes también tiene alta variación, pasando de 1 a 8 micrones (milímetro dividido en mil partes) según el ángulo del cigüeñal.

Las diferencias entre un motor de calle y un vehículo de competición F1 son considerables, mencionaremos algunas. Como se ve en la tabla comparativa, un F1 funciona a un máximo de 15000 RPM mientras que un auto de calle difícilmente supere las 6000/7000 RPM. La potencia por litro es al menos tres veces superior en un F1, esto quiere decir que para un motor del mismo tamaño, el F1será al menos tres veces más potente. Esto es claro al ver que se obtienen 600 HP de un motor de 1.6 litros.

Los cambios de aceite en Fórmula 1 se realizan en cada carrera, lo que equivale a 300/400 km. En un vehículo de calle los cambios de aceite promedian los 10000 km, dependiendo de cada vehículo.

A diferencia de un auto convencional, el F1 utiliza una tecnología de cárter seco. En este sistema, el aceite se almacena en un tanque separado y no en el fondo motor. Esto evita que el aceite se mueva libremente en el motor ante fuertes maniobras. Recordemos que las fuerzas de inercia generadas por las altísimas aceleraciones complican el clásico sistema de cárter de aceite.

Productos F1

Hemos visto que las diferencias entre la Fórmula 1 y los autos de calle son notables, pero la calidad de los lubricantes Shell es siempre la máxima. A continuación detallamos los productos que utiliza el equipo Ferrari, disponibles también en el mercado.

  • Shell V-Power: Combustible de pista que comparte el 99% de su composición con el combustible de calle.
  • Shell Helix Ultra: Aceite de motor con tecnología PurePlus 100% sintético proveniente del gas natural, asegura la protección y confiabilidad del motor de Fórmula 1 en condiciones extremas.
  • Shell Spirax: Aceite de transmisión que protege los engranajes de las cajas de cambios bajo las altas presiones generadas en la competición.
  • Shell Gadus: Grasa que ofrece protección y eficiencia extra en los rodamientos.

¿Sabías qué?

Debido a la propulsión híbrida, los nuevos motores F1 requieren también aceites dieléctricos. Shell incorpora para esta aplicación el nuevo aceite Diala con tecnología GTL (Gas to liquid).