Por Néstor Setzes
Generalmente, cuando se decide una desvinculación afloran cuestiones que estaban adormecidas en cuanto a la idoneidad del empleado, es decir en cuanto a sus conocimientos, valores, motivaciones, rasgos de personalidad y aptitudes demostrados en su comportamiento en el trabajo.
Tener en la empresa a un empleado que no debe estar allí es siempre oneroso y a medida que pasa el tiempo más aún, es decir que mientras más se extienda esa relación laboral más oneroso será y no solo en cuanto al costo de la indemnización. Esto es válido también desde la perspectiva del empleado que está desperdiciando su tiempo en una relación laboral sin futuro.

Es a partir de ello que en Sicfie desarrollamos una herramienta muy valiosa para la organización: las pruebas de continuidad.
Se trata de realizar una evaluación del empleado a los dos meses y medio de su incorporación (durante su período legal de prueba) y al año de antigüedad.
Ambas evaluaciones deben ser integrales y su resultado definido por la autoridad máxima de la empresa en una suerte de “control por excepción” o “pasa no pasa”.
Para ello es necesario llevar un “registro de antigüedad del personal” y a partir de la información que surge de allí establecer la evaluación (evaluación de dos meses y medio o evaluación del año) a quien corresponda.
Esto implica que el proceso de incorporación a la empresa no concluye cuando el empleado comienza a trabajar, sino que concluye recién al año cuando ya se han superado ambas evaluaciones.
Esto permite reconfirmar de manera ordenada y previsible las aptitudes reales del empleado dos veces en su primer año, y en caso de tener que discontinuar la relación laboral que se haga en un tiempo corto que no traiga perjuicios siempre visibles para ambas partes (empleado y empresa), ya que ese tiempo de relación laboral insana deja de extenderse innecesariamente.
Si se implementa correctamente el “proceso de incorporación de personas a la organización” con todos sus pasos y se efectúan las “pruebas de continuidad” se habrán aplicado dos herramientas que en conjunto mejoran ostensiblemente la productividad, el ambiente laboral y la relación con el plantel estable de la empresa, objetivos tan ansiados por todos.
* SICFIE, Asesoramiento y Control PyME – Coaching empresario / [email protected] / www.sicfie.com.ar