LUBRI-PRESS

Test: Toyota Hilux SRX 4×4 Automática

La nueva referencia La nueva Hilux quiere seguir siendo la pick-up más vendida del país. La SRX tiene una misión más difícil: posicionarse entre las chatas de lujo, donde Toyota hasta ahora no tenía mayor presencia.   La octava generación de la Toyota Hilux ya está a la venta en la Argentina. En Lubri-Press la manejamos por primera vez en noviembre, durante su lanzamiento en Mendoza. Y ahora pasamos una semana con la versión tope de gama: SRX 4×4 Automática. Esta nueva crítica se centrará en esta versión en particular. Sucede que la nueva Hilux tiene la misión de mantener el liderazgo en el segmento de las pick-ups medianas de la Argentina. Pero esta variante SRX –que no existía en la Hilux anterior- encara una tarea todavía más difícil: pelear entre las chatas más equipadas, lujosas y caras, donde Toyota hasta ahora no tenía mayor presencia. Manejamos la Hilux SRX Automática durante una semana y la crítica completa se reproduce a continuación. POR FUERA En la primera crítica ya hablamos del diseño y de las medidas de la nueva Hilux, en comparación con la anterior generación. Pero, ¿cómo diferenciamos a una Hilux SRX de otra más convencional? El diseño y los accesorios son fundamentales para el segmento de las pick-ups de lujo. Son aquellas que no necesariamente se van a destinar al trabajo: camionetas que serán utilizadas en la ciudad, en la ruta y en todo tipo de terreno, aunque rara vez llevarán una carga pesada. Más familia, valijas y juguetes recreativos, que bolsas de semillas o cemento. En la SRX, estos detalles de diseño son pocos, pero bien puntuales y fáciles de distinguir. Por empezar, es la única versión de la Hilux que viene con faros delanteros bi-led: así llama Toyota a las luces diurnas de leds (es la tira superior de la óptica delantera, que se enciende al poner en marcha el motor, sin necesidad de prender las luces) y al proyector central de led, que reemplaza a una luz halógena convencional. Este proyector tiene regulación automática de altura, en función de la carga que lleve el vehículo. Otros detalles exclusivos de la SRX son los cromados en picaportes y molduras de las ventanillas laterales. Sin embargo, lo que más sobresale al primer golpe de vista son las espectaculares llantas de aleación de 18 pulgadas. Están calzadas con neumáticos DunlopGrandTrek 265/60 R18 y son las responsables de darle a la Hilux la estética más agresiva y deportiva de toda su historia. Fíjense bien que no dije “bonita” ni “atractiva”. Como ya mencioné en la primera crítica, el diseño de la nueva Hilux no es el mejor logrado de su segmento. Pero tampoco lo fue la anterior generación (y eso no fue impedimento para convertirse en la favorita del público). POR DENTRO En el interior, el equipamiento exclusivo que diferencia a esta SRX de otras Hilux es todavía más acotado. Y no porque esté “pelada”, sino porque las versiones SRV y SRV Pack ya vienen muy bien dotadas de fábrica. Todas tienen la pantalla táctil flotante de siete pulgadas (si ya me parecía extraña y muy expuesta, ahora me decepcionó el hecho de que, al manejar en el campo, la tierra se adhiere por estática en toda su superficie, contorno y recovecos). Y todas tienen el deportivo volante multifunción en cuero (de muy buen tacto). Además, la SRV Pack ya viene con el tapizado en cuero (que combina revestimientos naturales con sintéticos) y la butaca del conductor con ajuste eléctrico. Entonces, ¿qué tiene la SRX que no posean las otras Hilux? Apenas el acceso sin llave y encendido por botón. Otro detalle menor: los levantavidrios eléctricos one-touch en las cuatro ventanillas, en lugar de sólo para el conductor. En un uso más extenso, sentí una importante mejora en la posición de manejo: después de hacer muchos kilómetros, el cuerpo baja más descansado. En eso influye también la importante mejora en la insonorización. La calidad de los materiales es superior, aunque por el precio que tienen estas pick-ups medianas full –cada vez más cercano al de una Ram 1500– bien podrían ofrecer detalles más cuidados. Lo que realmente me encantó fue el nuevo diseño del tablero. Es muy claro y completo, pero lo mejor de todo es la computadora de abordo: es la pantalla TFT de 4,2 pulgadas ubicada entre el velocímetro y el tacómetro. Es completísima y requiere estudiar el manual de usuario con detenimiento, para sacarle todo el provecho. Mis funciones favoritas: la calculadora que permite estimar y guardar el consumo de combustible no sólo en litros, sino también en pesos (agregando la variable del valor del litro de diesel cargado). Otra: la calificación de consumo, que le otorga puntaje al conductor en función del manejo ahorrativo, con notas específicas para la forma en que arranca el vehículo y en que maneja a velocidad crucero. Otros detalles que no son exclusivos de la SRX, pero que dejan en claro lo bien pensada que está la nueva Hilux: salidas de aire para los pasajeros traseros (cromadas y todo) y cargador de 220 voltios dentro del apoyabrazos central delantero. Este tomacorriente puede alimentar una computadora personal o recargar un teléfono celular en pocos minutos. SEGURIDAD Acá tampoco hay novedades. Y, una vez más, esto no habla mal de la SRX. Habla muy bien de las Hilux SRV y SRV Pack, que ya vienen de serie con siete airbags, frenos ABS con EBD y BA, control de estabilidad, control de tracción, control de balanceo de tráiler, asistencia al arranque en pendiente y control de descenso. A eso hay que sumarle los anclajes Isofix, los cinco apoyacabezas, los cinco cinturones de seguridad inerciales de tres puntos y la excelente calificación de LatinNCAP. El organismo que evalúa la seguridad de los autos que se venden en América Latina ya sometió dos veces a la nueva Hilux a sus crashtests. La primera fue una prueba de choque patrocinada por Toyota. Se compró en Chile una unidad producida en Tailandia, ya que las aseguradoras

La nueva referencia

La octava generación de la pick-up de Toyota ya está en la Argentina. La manejamos durante un día en Mendoza. Más tecnología. Más seguridad. Y un gran desafío: superar a la vieja Hilux.

La Ruta del Pehuén

Durante cuatro días, Lubri-Press recorrió rutas de montaña, caminos de ripio y senderos de nieve en Neuquén. Visitamos volcanes, pero también centros de esquí y zonas petroleras. El único objetivo: celebrar a dos best-sellers Made in Argentina.

Resistiré

La SUV basada en la Hilux competía sola en su segmento. Pero el impuestazo que recibió este año la ubicó al mismo nivel de precio de modelos importados y más modernos. Así y todo, la SW4 se defiende a base de robustez y confiabilidad.