Bujías Bosch la pieza clave con 120 años de historia

La producción de Bosch comenzó en 1897. Todo comenzó con un magneto de alta tensión.

Bosch ofrece hoy una ampla gama de bujías y componentes para el encendido.

Las bujías son un elemento fundamental e indispensable para el rendimiento del motor de un vehículo. Deben ser capaces de detonar de manera segura la mezcla aire combustible bajo todas las condiciones de funcionamiento. No es una tarea fácil debido a las diversas cargas a las que la bujía está expuesta en el motor, ya sean eléctricas, mecánicas o químicas y térmicas.

Bosch ofrece una extensa gama de bujías y componentes para el encendido, los cuales se adaptan a las necesidades específicas de los diferentes motores del mercado de posventa, hace ya más de 120 años.
El año clave del comienzo de la producción de este producto fue 1897 cuando la compañía comienza a desarrollar el magneto de alta tensión para luego patentar 5 años más tarde la primera bujía combinada. De este modo, en 1911 Bosch logró producir alrededor de un millón de unidades, a partir de la gran demanda y necesidad de los clientes.

El gran avance de la compañía en el mercado de las bujías fue tan significante que en 1914 Bosch decidió abrir la primera planta para fabricar exclusivamente bujías en Stuttgart, Alemania. Luego de muchas etapas de investigación, evolución y desarrollo, en el año 1929 se lograron vender 25 millones de bujías, llegando a fabricar la primera bujía exclusiva para Bosch Motorsport, que hoy es uno de los productos más reconocidos por los equipos de competición.

Para el año 2002, la compañía ya poseía 5 plantas, más de 20.000 bujías desarrolladas, y todo el potencial para continuar creciendo dentro del mercado. Gracias a los estándares de calidad a nivel mundial, a la materia prima centralizada, a la flexibilización de producción y a la alta inversión, Bosch logró posicionarse globalmente con su producción en diversos países.

La compañía trabaja de manera ardua para continuar manteniendo bujías de alta calidad y rendimiento, e inspirar confianza en los consumidores, a lo largo de los años. En este sentido, los procedimientos de producción como el montaje termorretráctil o los recubrimientos niquelados en bujías y roscas se mejoran continuamente para garantizar tanto una gran fiabilidad como una larga vida útil.

Además, la compañía ofrece al cliente acompañamiento y mantenimiento durante todo el ciclo de vida del vehículo. Los talleres están mejor equipados para poder llevar a cabo una reparación y un mantenimiento rápido y eficiente utilizando la tecnología de análisis de sistemas para vehículos de Bosch, dado a que los sistemas y los componentes de los vehículos cada vez son más complejos y diversos.

Las bujías Bosch continúan buscando adaptarse constantemente a las necesidades específicas de los diferentes motores que hay en el mercado y responder a las exigencias de la nueva movilidad, como así también a las de sus clientes.

Para más información sobre bujías Bosch, ingresá a: @bosch.autopartes.